Mi novio y yo llevamos juntos tres meses. Las cosas han ido bien durante mucho tiempo, pero en las últimas dos semanas hemos empezado a discutir. A él le gusta mucho llamar y mandar mensajes, pero yo soy más de quedarme sola y estoy deseando que venga el fin de semana. A él le gusta el orden, es riguroso con todo y es más realista. Yo soy mitad y mitad, a veces caótica, a veces metódica. Pero en las últimas semanas me está insistiendo mucho desde mi punto de vista y le he dicho que me estoy guisando en la relación, que hace dos días tuvimos una discusión por una tontería y esta mañana me ha dicho que nuestra relación se ha acabado. Nuestra relación se acabó.

Nos conocimos y en cuanto me vio empezó a besarme apasionadamente y a acariciarme. Le rechacé. Me besó unas cuantas veces más y empezó a decirme que todos éramos diferentes y estábamos heridos y que se había acabado y que sería más fácil si hubiera alguien más parecido a nosotros. Yo estaba triste y él siempre me abrazaba y empezaba a besarme de nuevo. Yo estaba confundida. Le dije que no podía hacer esto. Él decía que quería estar con alguien que se pareciera a mí y al mismo tiempo me llamaba nena, me besaba y me abrazaba. Siguió así hasta que le dije que no quería dejarle. Empezó a besarme de nuevo y yo le devolví el beso. E hicimos el amor.

Y cuando nos separamos, me abrazó y me dijo que seguía queriéndome. La sensación de inseguridad se quedó conmigo. Una cierta culpabilidad por haber terminado tan rápido sin hablar. Sin embargo, él seguía diciendo que me seguía queriendo, sólo que no quería preocuparme. Su corazón me ama y se siente atraído por mí, pero su mente dice que somos demasiado diferentes y que no funcionará. Estoy muy confundida. Siento su distancia hacia mí. Siempre dice que me quiere, que me echa de menos, etc… Ahora está aún más frío, me pone triste y sinceramente no sé qué pensar de esto o si debo seguir adelante.